GenAI en el trabajo: ¿Estamos listos o solo decimos que lo estamos?
Es momento de detenernos y reflexionar sobre lo que realmente significa estar preparados para el futuro del trabajo.
19 agosto, 2024 / 7:31 am
Para mí, ignorar la revolución de la Inteligencia Artificial Generativa (GenAI) en el entorno laboral sería tan absurdo como intentar conducir sin ruedas. Y sin embargo, parece que estamos conduciendo a toda velocidad hacia un muro que podríamos haber esquivado si tan solo alguien hubiera recordado que las ruedas son importantes. ¿A qué me refiero? Vamos a desglosarlo con un poco de sarcasmo, porque a veces es la mejor manera de digerir las crudas realidades.
94% dicen estar listos para aprender nuevas habilidades con GenAI. ¡Fantástico! Parece que tenemos un ejército de trabajadores entusiastas, listos para abrazar la tecnología del futuro. Pero, ¿será que este 94% realmente entiende lo que significa aprender nuevas habilidades? Porque, y no es por ser pesimista, he visto gente decir que está “lista” para aprender, y luego desmoronarse ante la primera pantalla de error que aparece. No obstante, me da esperanza ver que, al menos en teoría, la disposición está ahí. Solo espero que no se convierta en una de esas listas de propósitos de Año Nuevo que todos olvidamos en febrero.
5% dicen que sus empleadores están activamente capacitando a su fuerza laboral. Aquí es donde la cosa se pone interesante… y un poco triste. Así que, mientras la gran mayoría de los empleados está lista para subirse al tren de la GenAI, solo un mísero 5% dice que sus empleadores están ayudándolos a comprar el boleto. Es como si el resto de las empresas pensaran: “Sí, aprendan habilidades nuevas, ¡pero no esperen que les demos las herramientas o el tiempo para hacerlo!” Esta desconexión no solo es preocupante, es prácticamente una receta para el desastre. ¿Estamos entrenando a nuestros empleados para un mundo que ya llegó o simplemente estamos esperando a que se arreglen solos? No soy un fan de la segunda opción, pero parece que muchos empleadores sí lo son.
75% ya están usando GenAI en el trabajo hoy. Ok, esto suena prometedor, ¿verdad? Tres de cada cuatro empleados ya están metidos en el mundo de la GenAI, usándola para hacer su trabajo diario. Pero aquí es donde me pregunto: ¿qué tan bien la están usando? Porque una cosa es “usar” una herramienta, y otra muy distinta es usarla eficazmente. Me imagino que muchos están descubriendo los entresijos de la GenAI a base de prueba y error, lo que es una estrategia tan fiable como saltar de un avión y esperar que el paracaídas se abra solo.
78% de los usuarios de GenAI llevan sus propias herramientas al trabajo. Este es, sin duda, mi dato favorito: la gran mayoría de los usuarios de GenAI no están esperando a que sus empresas les den las herramientas, sino que las están trayendo ellos mismos. Esto me suena a una mezcla de iniciativa y desesperación. Porque, seamos sinceros, si estás llevando tu propio martillo al trabajo, es probable que sea porque el jefe sigue empeñado en darte una piedra para clavar esos clavos. Es admirable que tantos estén tomando la iniciativa, pero también es un reflejo bastante sombrío de cómo las empresas están rezagadas en equipar a su gente.
Conclusión: Es momento de detenernos y reflexionar sobre lo que realmente significa estar preparados para el futuro del trabajo. No se trata solo de tener la disposición de aprender, sino de contar con el apoyo necesario para hacerlo. Esta desconexión entre la disposición de los empleados y la acción de los empleadores no puede continuar. Si las empresas quieren mantenerse competitivas en un mundo donde la GenAI es cada vez más relevante, deben asumir su responsabilidad y empezar a equipar a su gente con las herramientas y el conocimiento necesario.
El llamado a la acción es claro: no esperemos más. Es hora de cerrar la brecha y asegurarnos de que nuestros equipos no solo estén listos, sino que estén verdaderamente preparados. De lo contrario, corremos el riesgo de ver cómo esa brecha se convierte en un abismo insalvable, con todas las oportunidades cayendo al vacío.
Diego San Esteban
Presidente Latam Open Finance & Chief Sales Director N5
Soy un profesional pragmático, de visión estratégica, referente de la región. Mas de 30 años de experiencia transformando la industria financiera, desarrollada en más de 180 clientes, 120 de ellos, bancos y aseguradoras de la región.
Trabajando en 4 mesas de innovación de bancos centrales de la región, colaborando con 3 ministerios de desarrollo tecnológico e innovación de Centro América y Latam Norte.
Soy presidente de Latam Open Finance una organización internacional que fomenta la inclusión financiera. Director del posgrado de especialización de gestión de entidades financieras de la Universidad de Buenos Aires, una de las mejores de América. Responsable del desarrollo y estrategia comercial de N5, una empresa dedicada a la industria financiera con un crecimiento anual del 500% y nombrada por Microsoft como la startup del año 2021 para Latam & Caribe.
Vamos a reflexionar sobre los temas que afectan, impactan o modifican los comportamientos de la industria financiera, vamos a fundamentar la reflexión en datos, en comportamientos del mercado, en la realidad contextual y fundamentalmente en el sentido común, buscando romper silos de pensamiento
Reflexionar en tiempos de crisis es una necesidad, hay que detener toda acción producida por la inercia para generar valor.